El amor no es solo bioquímica. Cristian

El autor, José Antonio Marina, en el primer párrafo del su artículo admite su fascinación por la complejidad de los fenómenos afectivos, ya que requieren de la acción cerebral de la acción química de los neurotransmisores y de las hormonas. Con lo cual estoy totalmente de acuerdo porque los fenómenos afectivos son procesos inverosímiles, que requieren la materia para poder producirse. Y al igual que a Marina a mi me crea un impacto que a partir de la materia se forme todo ese mundo inmaterial. Él lo hace defendiendo la teoría emergentista. A mí me parece inadecuada porque me convence más el dualismo.

Ya en el tercer párrafo cambia de tercio para comenzar a hablar de que algunas sustancias producen los mencionados fenómenos afectivos o procesos sentimentales. Estas sustancias actúan como las drogas. Creando en las personas dependencia por la persona de la que se han enamorado, sin apartar la atención hacia ella y apareciendo los pensamientos intrusivos (el amante no puede de dejar de pensar en la persona de la que se ha enamorado. Y la otorga todo tipo de perfecciones.)Sigue diciendo que es una experiencia agradable, enérgica, euforizante, etc. Con una sensación de bienestar energía y demás. Es cierto que esas sustancias actúan como intensificadores que se manifiestan al conocer una persona que te atrae y te comienzas a enamorar, sientes todo lo que Marina menciona, todas esas sensaciones y emociones.

En el siguiente párrafo habla de que años atrás los  científicos ya empezaron a investigar sobre esas sustancias químicas que hacían a las personas enamorarse ya que estaban seguros de que eran las responsables de que los procesos afectivos se produjesen. Comenzaron haciéndolo con sustancias que ya conocían y producían efectos parecidos. Sabían que había una sustancia encargada de producir el enamoramiento, similar a la feniletilamina que es la causante de los sentimientos de bienestar, euforia, etc. Por otra parte estudiaron otras sustancias relacionadas con los pensamientos casi obsesivos que se tienen al estar enamorado. A mi parecer esas sustancias son las responsables de sentir esas sensaciones al enamorarte, igual que muchas otras sustancias producen otros efectos u sensaciones.

Ya  en el sexto párrafo de su artículo comenta que hay sustancias como la dopamina y la noradrenalina, involucradas en el enamoramiento, produciendo sensaciones de euforia, energía, etc. Otra sustancia también está involucrada, la serotonina en dosis bajas, produciendo el pensamiento obsesivo en la persona de la que te enamoras. A eso se le sumo otra aportación científica que demostraba que al enamorarse se sufría una tipo de desactivación de la parte frontal de nuestro cerebro que es la que se encarga del pensamiento crítico. Esa es la razón que dieron para demostrar el por qué no se ven defectos en los amados.

Posteriormente apareció otra sustancia, la oxitocina (una hormona), que se segrega tanto por hombres como por mujeres en las relaciones sexuales. Uniendo la pasión con la ternura. Es la causante de que el amor sea duradero. Con lo cual creo y es cierto que a mayores relaciones más duradero es el amor, y está comprobado de ahí el dicho del roce hace el cariño. Esto me ha recordado un pasaje de la película Tapas en el que un empleado chino le dice a Manolo (el protagonista) tras haber discutido con su mujer, que el amor era como las plantas y si no lo riegas a menudo se seca.

Finalmente acaba exponiendo que el amor es únicamente bioquímica pero que él no quiere pensarlo porque lo que para el importa es el resultado y no como se llega a él.  Visto de este modo yo también pienso que el amor únicamente es bioquímica, pero al igual que Marina no me gusta reducirlo simplemente a eso. Pienso también que es algo tan bonito que no se debería cuestionar porque lo que importa es el resultado creado por esas sustancias.